​Agradecidos por la herencia de este hermoso lugar, nos esforzamos por protegerlo y conservarlo para las futuras generaciones y así continuar el trabajo de nuestro padre, embelleciendo y trabajando este legado responsablemente, con la esperanza de que nuestra granja permanezca siempre hermosa​ y nuestros descendientes puedan gozar de ella tanto como nosotros.

​Años después de su muerte, la escuela por la que nuestro padre tanto luchó fue renombrada en su honor. Su legado permanece hoy fuerte en Monteverde, conservado en la memoria de todos sus descendientes.


Historia

Don Rafael Arguedas Herrera, 1909-1988

Circa. 1950



Somos un pequeño establecimiento operado por una autentica familia costarricense. La mayoría de los productos que usamos son cosechados en la propiedad como los frijoles, plátanos, bananos, y productos que elaboramos de la caña de azúcar, como Azúcar moreno "Tapa de Dulce" y sirope, entre otros.

Nuestra ideología es la mayor satisfacción de quienes nos visitan. Por lo que nos dedicamos a brindar un servicio personalizado en un ambiente familiar.

Ven y disfruta de la tranquilidad y privacidad que te ofrecemos en este pequeño paraíso.

Nosotros

Esta hermosa propiedad de 5 hectáreas fue adquirida en el año 1972 por nuestro padre, Don Rafael Arguedas Herrera, quien fue uno de los cinco primeros colonizadores de Monteverde; La fecha de su llegada a Monteverde (28 de diciembre de 1934) es facilmente recordada, ya que al día siguiente, nació el primero de sus hijos. A lo largo de su vida, nuestro padre se ganó el respeto y la admiración de todos los lugareños por a su carácter generoso; siempre fue un hombre con disposición en ayudar a los demás, especialmente a los mas necesitados. 

Uno de sus mayores aportes, fue lograr establecer en la zona al primer maestro de primaria, y mas tarde, el haber edificado de la primera escuela primaria de Monteverde, para la cual no solamente aportó el terreno y dinero, sino también años de esfuerzo. 
En aquel tiempo la mayor parte de esta propiedad era dedicada a la producción de caña de azúcar y también a la ganadería, labor a la que se dedicaban los hermanos Arguedas junto a su padre, quienes contaban con un trapiche para procesar la caña, moliéndola e hirviéndola hasta obtener la miel y tapas de dulce, productos que entonces eran utilizados en lugar del azúcar.


Hoy en día conservamos ese trapiche como recuerdo a nuestro padre, también le mostramos a nuestros visitantes lo bien que todavía funciona. Usted podrá disfrutar de un delicioso vaso de jugo fresco de caña de azúcar recién salido del trapiche.